Linna: Desde la universidad entrar en la cama de los hombres se me hizo fácil.
Pero eso ya no es algo que me llene.
Ya no busco un revolcón y se acabó, necesito algo mas que solo eso, pero la verdad no creo estar preparada para nada, no sé como es tener una relación normal.
Nos embriagamos con mi mejor amiga y bueno una cosa llevó a otra y terminamos en una habitación con un tipo talla XXL, ¡Wow!
Era algo de otro mundo, pero no me importaba yo ya no quería esto, debía salir de allí… Sin embargo, su misterio, su control, su dominio sobre mí y mi cuerpo… Quería pasar pero, ¡Que sueño de hombre!
Ignacio: Era hermosa, mas que su amiga, yo la deseaba a ella, me provocaba besarla, tenerla para mí. No lograba entender de dónde salían estas ganas por ella.
Yo no estaba acostumbrado a dejar ir lo que quería para mí.
“En el pasado, la habían tomado por el tipo de mujer equivocada, y el dolor en sus ojos me destrozó el corazón.
¿Qué estaba haciendo?
¿De verdad iba a trabajar su dulce cuerpo y dejarla?
¿Podría?
¿Qué otra opción tenía?”
