Mostrando las entradas con la etiqueta Bilogía Tabú. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta Bilogía Tabú. Mostrar todas las entradas

jueves, mayo 28, 2020

Bilogía Tabú

1. Mi maldita droga dura

Nicolle tiene diecisiete años, poca maldad y varios frentes abiertos que la obligan a volver a Francia, su ciudad natal. 

En su vida se cruza irremediablemente Marc Ferrera, un imponente hombre separado, mucho mayor que ella, y padre de su mejor amiga. 

Será quien pueda ayudarla a solucionar sus problemas. 

O no. 

También puede convertirse en la gran piedra de su camino, en su mayor adicción.

Por otro lado, Eric, un malabarista callejero que habita en el barrio bohemio de París, capaz de hacer magia con las manos y con los sentimientos.

Una intensa, morbosa y erótica historia que habla del tabú en su máxima potencia y de manera explícita entre un hombre experimentado y una niña inocente a la que el sexo le cambiará la vida.

Un hombre adicto al sexo. 

El padre de su mejor amiga.

El novio de su madre.

Su maldita droga dura.

2. Mi maldita adicción

«Cuando al fin reconoces que eres adicto, que estás completamente enganchado, quieres apartar esa droga de tu vida a toda costa. 

Sin embargo, la dejas cerca. 

La guardas en algún rincón de la casa. 

Sabes que no vas a tocarla, o eso es lo que te repites. 

Pero está ahí, por si un día recaes. 

Eso significa una cosa: en realidad no quieres dejarla. 

Te has convencido de que es lo mejor para ti y te esfuerzas en llevarlo a cabo».

Marc Ferrara tendrá esa droga cerca, en su propia casa, y el monstruo crecerá, trayéndole recuerdos de un pasado perturbador y desbocado. 

Intentará aplacarlo con música y distancia, pero la tentación será demasiado grande y comenzará a consumirlo.

Una destrozada Nicolle buscará refugio, y puede que unas manos que saben hacer malabares y magia sean ese lugar seguro que necesita. 

Pero algo ha cambiado, algo que se escapa de su control y de su entendimiento. 

Ya no es solo curiosidad por ese hombre mucho mayor que ella, el padre de su amiga. 

Ya no es solo deseo. 

Es más, mucho más.

Aquella muchacha que llegó a su casa con una mochila en el hombro comenzó siendo una maldita droga dura difícil de controlar. 

Ahora se ha convertido en algo mucho peor.

En su maldita adicción.