Erin Wentworth había conseguido escapar de la familia de su marido tras enviudar.
Y esperaba mantenerse a salvo en aquella cabaña en medio de las montañas hasta dar a luz a su hijo.
No iba a permitir que nadie le arrebatara a aquella criatura.
Pero los poderosos Wentworth habían contratado a un cazador de recompensas para que diera con su paradero.
Quinn Yarborough era además amigo de la infancia de su marido, y no tuvo dificultades para encontrarla.
Los problemas surgieron cuando una tormenta los aisló del mundo y tuvieron oportunidad de conocerse.
Entonces, Quinn se empezó a preguntar cuáles serían las verdaderas intenciones de los Wentworth para hacer volver a Erin…