Solo fue necesaria una mirada… para convertirme en una mentirosa.
Mi vida es un desastre.
Amo a un hombre.
No, amo a dos.
Creo…
Uno me hace el amor, el otro consigue que arda.
Uno es mi roca; el otro, mi kriptonita.
Estoy rota, perdida, y me odio a mí misma, pero no puedo detenerme.
Esta es mi historia.
La historia de mi perdición.