Marisa es una joven estudiante de periodismo con ganas de hacer méritos en un trabajo de clase.
Para ello decide entrevistar a una mujer condenada por matar a su madre.
A lo largo de sus conversaciones con ella, Marisa descubrirá que no todo es lo que parece: los muertos no siempre son inocentes y los asesinos no siempre son monstruos, los padres no son siempre esas personas devotas amantes de sus hijos, sino auténticos verdugos que hacen la vida imposible a sus hijos.
Descubrirá que hay situaciones tan dolorosas, tan extremas, que a veces la única salida parece ser matar o morir.